Me gusta este paÃs porque ya no es creÃble. Viva la banana, Belén Esteban y David Bisbal. Se me ha ido la olla y he perdido el punto de vista. En la Haya existe un tribunal donde Garzón puede exiliarse legalmente y no tendrá problemas con los papeles, puesto que se los han quitado. Jueces y heces huelen que apestan. ¿Habrá sido una decisión corporativa, lo han sometido a privada votación, asÃ, tipo petit comité pero a lo facha?...
Opinión |
29 de mayo de 2010Consuelo G. del Cid Guerra
No hace mucho me dijo alguien que este periódico es "demasiado radical", por lo que a mediados de Mayo ya nos han jodido con las flores. Crisantemos blancos -porque rojos no existen, que yo sepa- les podemos poner a la puerta de cada juzgado. Viva España, la paella, el tablao y los toros. Otro pasito hacia atrás, como quien no quiere la cosa, y el caso será aplicar de nuevo la ley de Peligrosidad Social, entre los que -seguro- me meten alegando cualquier improperio, incomodidad o conducta antisocial. Empiezo a comprender por qué una gran parte de mis amigos solicitaron el certificado de apostasía : hay que constar, no sólo contar. Yo renuncié al diablo, a sus pompas y a sus obras cuando era menor de edad. Me vistieron de blanco y un cura puso en mi mano el cirio, entiéndase vela, que chorreaba cera y me quemó por fuera. Ahora me han quemado por dentro. En este cacao mental tan sumamente chabacano, vulgar, hortera y subliminal, ahora muchos aseguran ser budistas y te lo juran todo por su nuevo dios dorado y gordo mientras se apuntan a todas las páginas de contactos para ir a un espectáculo de sexy boys, donde un individuo disfrazado de bombero les pone el tanga en la boca. Y van. Corriéndo- Se. La peña esta carece de criterio y es la misma que apostaba por un "cambio" tras el Felipismo. Se les va a echar encima una lluvia de mierda considerable mientras apuran la caipiriña. Necesito una experiencia religiosa, pero de las de verdad. Que no me amañen el canto gregoriano en un after porque no es lo mismo. Comunidad. Calamidad.
Ruína. Inquina. No trago con los discursos próximos del prójimo, que canten misa en hebreo.