Las cifras de la vergüenza
Este fin de semana ha estado sembrado de dolor, rabia e impotencia. Cuatro mujeres han sido asesinadas por sus parejas.
Opinión | 17 de julio de 2024Mariam García
Corresponde al Ministerio de Igualdad la propuesta y ejecución de la política del Gobierno en materia de igualdad y de las políticas dirigidas a hacer real y efectiva la igualdad entre mujeres y hombres, la prevención y erradicación de las distintas formas de violencia contra la mujer. Estas son las funciones del #MinisterioDeIgualdad, pero nada más lejos de la realidad.
Este fin de semana ha estado sembrado de dolor, rabia e impotencia. Cuatro mujeres han sido asesinadas por sus parejas, HOMBRES, aunque llamarlos así ofende al resto de hombres que SÍ respetan a las mujeres, que son la inmensa mayoría.
No podemos apartar la mirada, negar la violencia o girar la cabeza. Todos, absolutamente todos unidos, debemos aunar fuerzas y condenar a esta lacra, solamente unidos podremos al menos minimizar éstas cifras de la vergüenza y del dolor.
Mujeres asesinadas que algunas estaban dentro del programa Viogén.
Algunas de nuestras hermanas han dejado hijos , algunos han presenciado el crimen de quién les dió la vida, (víctimas colaterales, víctimas de la violencia vicaria).
Previamente al crimen, todo el núcleo familiar ha estado viviendo la violencia física y psicológica en el núcleo familiar, y nadie, absolutamente nadie ha estado protegido del agresor.
Sabéis que ni las órdenes de alejamiento, ni las pulseras telemáticas, ni las casa de acogida protegen a las víctimas. El maltratador acechará a sus víctimas hasta conseguir asesinarlas.
Todas estas mujeres y niños que han sido asesinados desde que hay registros (2003), bien merecen ser recordadas, bien merecen un respeto y ni que decir tiene que sigamos luchando para erradicar esta lacra que mata día sí y día también, que maltrata a diario y que nos privan de lo más esencial: una vida digna libre de violencia. Nadie es quién para privarnos de ella.
Los minutos de silencio no salvan vidas, los protocolos no salvan vidas, la justicia sin formación no salva vidas .
Muchísimo dinero destinado al Ministerio de Igualdad, Judicatura, casas de acogida, puntos de encuentro familiar... y nada llega a las víctimas, las revictimiza, las mata.
Una Ley que no salva vidas.
Por todas ellas pedimos que se cambie la Ley y se deje en manos de profesionales. Un Ministerio que olvida a las mujeres e hijos, a sus padres, hermanos y resto de familia biológica y amigos.
Con impotencia y rabia lloramos sus pérdidas pero no las olvidemos, no normalicemos estos crímenes. Entre todos podemos minimizar la cifra de la vergüenza.
Por ellas, seguiremos luchando hasta erradicar a estos engendros.
¡¡¡Hasta siempre hermanas, no os olvidamos, no queremos seguir siendo números!!!
QEPD
