Ni siquiera es cuestión de ponerles a parir porque no han terminado. Tendremos pasto para mucha bestia, que nadie lo ponga en duda. Flora y fauna en todas sus variaciones. Existe porque se ve. Se ve porque atrae. ¿A quien? No nos engañemos: a millones de espectadores.
Opinión | 29 de julio de 2009La prensa rosa sangra sus amargas lágrimas de Barbie y Ken, lamentando lo inevitable. No me escandaliza. Ni siquiera me sorprende.
Sin embargo, el fondo del asunto, lo que yo me atrevería a llamar "clima moral", es lo que me subleva. Porque el fondo de todo esto es la pasta. El dinero mas fácilmente "ganado".¿Tienen la más mínima idea del caché que cobran estos personajes?¿Saben que presupuestos manejan los programas del corazón?¿Cuánto se puede llegar a pagar por una entrevista?¿Cuánto cobran los "terlulianos-comentaristas"?
Ahora, al cotilleo oficializado se le llama "periodismo de investigación". ¿Para eso se estudia una carrera universitaria? No se trata solo de programas, sino de personas entregadas a un circo romano para ver quien da más. Y muchísimo dinero. Grandes cantidades obtenidas de la forma más fácil que nadie pueda imaginar. A muchos les trae al pairo salir de ahí sin dignidad.
La rueda es la siguiente: Primero las cadenas autonómicas para posteriormente hacer el paseíllo por las nacionales. Mas las entrevistas que caigan en revistas del hígado rosáceo. Una temporadita incomoda para conservar el anonimato, eso si. Pero pasta por un tubo. Lejos, muy lejos de cualquier ciudadano que esta en el paro, por ejemplo. Y cada vez más distanciado del mundo real. La vida es una tómbola de luz y de color. ¿Cómo podemos deducir una entrevista "comprada" por el propio personaje, por ejemplo?. Por los intermedios publicitarios. Ojo al dato. ¿De que cifras aproximadas se puede hablar?: Siempre de miles. Por menos de mil, nadie da nada. Es decir, un mes de trabajo para cualquier españolito de a pie ¿Montante final de un escándalo? Sobre los cien mil, más o menos. Algunos, dependiendo del asunto, puede que más, y les sale un piso. Por lo menos el coche. Eso fijo.
¿Cómo llegar hasta allí?: De cualquier manera y con más facilidad de lo que nadie sospecha. Basta con entrar en cualquier página de internet dedicada al corazón. Los propios periodistas tienen un apartado en el que se lee: ¿HAS CONOCIDO A ALGUN FAMOSO? ¿Tienes una historia que contar? ESCRIBENOS. Y ancha es Castilla. Si además, el interfecto en cuestión, dispone de alguna foto, cualquiera (de esas que se hacen a medianoche en discos, por ejemplo, junto a un famosillo) la mesa está servida en cinco actos.
Ayer, al parecer se dieron de hostias dos periodistas-tertulianos. Cutre entre lo cutre. Carnaza. Gusanillo engarzado en anzuelo por la audiencia. No es ninguna broma, háganme caso: indecentes pastones.
No somos nadie.