Sembrar la polémica es servir la idea. Discutir es saber. Pensar es fundamental para no estar muerto. Vivir es mas sencillo sin pensar cuando todo va bien o simplemente funciona. En ese "funcionamiento" social estamos todos: Trabajo, casa, comida, unidad familiar.
Opinión |
11 de mayo de 2009Consuelo Garcia del Cid
Si falla la maquinaria, se para la vida ante aquel que no piensa, puesto que carece de interior. Un espíritu no se hace en un mes, supone la existencia, vital y material. Somos personas, no somos las cosas. Las cosas están o desaparecen y se quedan si existen cuando el ser humano se va por pura ley de vida. Las leyes vitales no son las mismas que las leyes en si, como no lo son los jueces, divinos o humanos. Nadie puede opositar para aspirar a ser dios. No existe titulo oficial en la divinidad, ni poderes, ni salas de audiencia, ni condenas aplicadas por otros hombres. Tampoco cárceles.
Podemos ser arte, parte, o no ser absolutamente nada: Y nadie se dará apenas cuenta mientras continuemos teniendo "las cosas". Pero si alguna de ellas nos fallara, si el pilar que sostiene esa cómoda arquitectura zozobra o cae, estaremos a solas con lo que somos y lo que hemos hecho. Si por distintos avatares, situaciones o conflictos de la vida, perdemos el trabajo, después la casa y probablemente el resto, y una mañana el espejo nos muestra el rostro triste y perdido de alguien que pregunta : "¿ Quien soy yo?", ninguna información externa nos dará la respuesta, tampoco nadie, solo las entrañas, la dura casquería ,podrá enfrentarnos a esa realidad insoportable como castigo infernal por no haber estado, no haber sido, no haber pensado.
Podemos aparecer en las enciclopedias dependiendo del hacer (bueno o malo), pero nunca en los diccionarios. Nadie resulta elegido para gloria alguna si no elige primero.
Podemos pasar el resto de la existencia jugando a ganar. Podemos hacer historia.
Por dejarlo pasar, por no implicarnos, por no mirar, no leer, no interesarnos mas allá de lo preciso, lo correcto y permitido. En esos lugares y con esas posturas, no esta permitido ser pobre. No tener.
Y en los adentros de tu templo, seras inadmisible por no pensar.
Y nunca, nunca sabrás, que debajo del asfalto, está la playa.