No pasará el 15 de abril como uno de los de más grato recuerdo en la historia. Como me recordaba mi amigo e historiador Jordi Mata, fue un 15 de abril cuando asesinaron a Lincoln. También cayó en ese fatídico día el desastre del hundimiento del Titanic.
Ayer, también 15 de abril, ante los ojos atónitos del mundo, París lloraba mientras Notre Dame, imponente obra arquitectónica centenaria y a su vez musa y escenario de otras obras de la literatura y el séptimo arte, ardía en llamas y se desmoronaban algunas de sus partes más icónicas.
No se hicieron esperar las declaraciones públicas de dolor por parte de múltiples gobiernos y personalidades.
En lamentable contraste, y puesto que la ignorancia es osada, también pudimos asistir a expresiones de alegría, en flagrante exibición de lo fácil que resulta confundir gimnasio con magnesio. ¿Cómo -se preguntaban algunos- se puede lamentar el incendio de Notre Dame habiendo niños muriendo en el mar? Los mismos que el día anterior se llevaban las manos a la cabeza por la caída de Facebook y WhatsApp.
Poco nos pasa.
Estas son algunas de las imágenes y vídeos que quedarán para el recuerdo.