Pepe Navarro: Polvos Es
A Encarna Sánchez la dilapidaron sin piedad después de muerta, y ahora le toca a Pepe Navarro, vivito y coleando, pretendiendo -y nunca mejor dicho- Que le quiten lo bailao. El tipo ha bailado mucho y con muchas que ahora se despedazan en los programas del páncreas e intestino delgado contando sus relaciones "cortas" que dan para mucho, pero que mucho. Despechadas o no, se despachan con todo lujo de detalles contra el pobre Pepe, que al parecer, supuestamente, se tira a todo lo que se mueve. Y es que "polvo eres, en polvo te convertirás, y los polvos que has echado también te traicionaran".
Opinión | 12 de abril de 2010Cordelia Colby
Yo me enganche a los programas de radio cuando ?Encarna de noche? parecía una especie de madre Teresa de Calcuta, la santa de los taxistas y salvadora
de todo tipo de desgracias humanas, próximas o ajenas. No era lo que se dice una tía buena porque era fea y retorcida por fuera, pero la radio fue su trono durante décadas, líder de audiencia y pasta por un tubo.
Mas tarde, reconozco sin pudor que me enganche a Pepe Navarro, antecesor de las famosas ?Crónicas Marcianas?, durante los años 90, cuando aquel programa procaz ?Esta noche cruzamos el Misissipi?, embestía noche a noche corneando al sueño, porque desde aquel descubrimiento que se llamo ?La Veneno?, ordinaria, vulgar entre la mayor de las vulgaridades, grosera, mal hablada, impúdica, descarada, desde entonces, digoooo, dormíamos mucho menos esperando a un señor que se tiraba pedos en directo, a algunas putas sadomaso que contaban sus mas escatológicas experiencias mientras Pepe era de entre todos el mas grande, el mas guapo, el mas rico y el mas listo.
Por entonces no se había escuchado todavía la palabra ?friki?, y Pepe era el gran descubridor del friki bajos fondos, sus partes, lumpen reciclado y barbarie personalizada con disfraz psicópata y psicodélico al más puro de los cachondeos salvajes en horas prohibidas. Nos salíamos, partíamos la caja a carcajada sucia y por las mañanas nos costaba tanto despertar?Aquel programa era una juerga privada de salón, un exabrupto diario que tenia su puntazo. Le llego la gloria, no infinita, y ahora se encuentra a la altura del betún por un hijo no reconocido ?todavía- con Ivonne Reyes, la venezolana hermosa que no sonrió por primera vez al contar su largo, largo romance con Pepe.
Pero yo creo que en esta plaza, el que este libre de pecado, que tire la primera piedra, porque se han tirado ?literalmente- unos a otras y otras a uno en plena posesión de sus facultades, sabiendo quienes eran, lo que hacían y por que lo hacían, aunque la cosa cambie cuando hay criaturas por en medio.
El hijo de Ivonne Reyes tiene diez años, y diez ha esperado ella para tirar de la manta revelando el nombre del padre : Pepe Navarro, que ni afirma ni desmiente, ni quita ni pone. Se mantiene en ese silencio sospechoso de los corderos y entre tanto largan todas, las de un ratito, las de un par de noches, las de alquiler, las de un mes y las de más de dos años. Caray con Pepe, menudo semental, que poderío, que arrojo sexual infatigable. Todo esto esta muy feo. Los trapos sucios se lavan en casa y con clase, que si la hay, se mantiene. Ahora incluso de habla de la mismísima ?Veneno? como ex amante suya, cosa que me cuesta imaginar, porque menudo camión entre las piernas, encima o debajo, dinamita pura del arrabal , salvaje transexual y pura reivindicación de carácter obsceno, arlequín ocasional descubierto cual Colon se encontró con América. Pepe, que te quiten lo bailao, y si el hijo es tuyo pues ya sabes lo que te toca, pero no esperes mucho, porque todos tus ex amigos, ex trabajadores, ex conocidos y circundantes están largando a gusto mas en contra que a favor. Hazte las pruebas, hombre, y que salga el sol por Antequera.
