Quiero desayunarte a ti, todos los días, con sabor a melancolía, de aquellos días en que esto escribí, en un mañana contigo, quiero repetirte hasta saciarme, quiero reflejarme en tu calma, quiero ser tu agua y ser amante viva dulce y amarga de todas tus noches hasta que nos despierte el alba, quiero leerte entre líneas y recitarte, tú que eres mi poesía, quiero que los poetas brillen con tu rima.
Piel con piel, que de tus besos viste mi cuerpo, en el mismo punto sin encuentro, se oponen tozudos nuestros encuentros, pero el convexo de nuestras noches es álgido momento que no olvidan nuestros recuerdos, y en el cóncavo de mis sueños se encuentra mi mayor deseo; Quiero desayunarte a ti, todos los días, con sabor a melancolía, de aquellos días en que esto escribí, en un mañana contigo, quiero repetirte hasta saciarme, quiero reflejarme en tu calma, quiero ser tu agua y ser amante viva dulce y amarga de todas tus noches hasta que nos despierte el alba, quiero leerte entre líneas y recitarte, tú que eres mi poesía, quiero que los poetas brillen con tu rima.