Símbolo y sindicalismo, todos afiliados a los colmillos del león. Vamos a meter la cabeza, a comprar flores, muñequitos de pelu-ché, tarjetas, y colirios para atenuar los ojos rojos de tanto llorar por?!La pena que me da! Recorrido imbécil de punta apunta, tomemos lista, tomemos nota: la que me puso los cuernos comiéndole la boca en un beso actoral al que se me vino a hacer de Romeo; el Romeo que se dejó vencer , no por la cicuta sino por el veneno humano donde no se puede decir que no, cuando la carne sobre el mostrador, abierta y escarlata nos mete por encanto; el encanto de estar sobre el embrujo cuando no podes creer lo que tus ojos miran, la Pepa que le ha sido infiel al marido pero y también al socio y al socio del socio, esa cadena milagrosa de la amistad donde todos nos queremos porque todos nos queremos. Felicidades por pedazos.
El que jugó por traición a la verdad. El que te tomó en cuenta los días de domingo asadito en mano si lo pagás vos, el amigo de casamientos y bautismos, el que puede asumir con suerte el día de algún velorio, para tomar café y contar chistes con sarcasmo; el que me pegó primero porque el que pega primero pega dos veces, el que me dijo sí, sí , sí-tres veces sí- y después sólo le alcanzó un no rotundo. Nos ganamos por goleadas. Meta y ponga camarada. Este socialismo de cagarnos unos en otros y en partes iguales. Si no me das, no tenés. Y el siniestro silencio cuando suplicamos explicación y consuelo. ¿Lobo estas?
Nunca está, nunca nadie está cuando el pellejo no es el suyo. Nunca nadie está cuando el amor nos hace bailar entre dos precipicios. Ahora se reconocen otras voces, aquellas desconocidas que se escapan a través del periódico, oh mediático Internet, Felicidades amigos! felicidades?cuando la muerte puede ser tan deseable, nadie sabe lo que puede pasar dentro de una sepultura porque se quedan con el ramito de flores de plástico mirando la oferta de los artificiales; pero y detrás, hondo, el Hombre es un carbón que no alumbra ni calienta, no es la Sed , ni el brillo de unos ojos, y los pájaros sin nombre se agrupan carroñeros, por la felicidad que no nos existe, cuando todo es tan armado, todo tan acomodado para la vitrina de la derrota.
Mis amigos, los que dicen serlo, aun esos que no conocen las quebraduras de mi cabello, estas medias con agujeros que me visto porque no tengo afán de conquistar a nadie, porque detrás de cada conquista seguro que media el interés por el oro?y el moro; que no saben de estas manos que me tiemblan, temblando al vaso que no logra volcar todo su güisqui para que el alcohol ahogue mis penas, cuando del otro lado, del lado todo es jauja y piedra libre y que Dios me salve de mis enemigos que de mis amigos yo, como dice; mis amigos hoy me han dejado sola, como siempre me ha acontecido frente al tajo que no sana, comprendo que la sangre asusta y menos si viene con el precio de esta oferta. He bebido mucho, es verdad, pero no logro emborracharme, no logro vaciarme de estos pensamientos tristes, pero tan reales, el cielo está vacío, y eso también mi amigo hoy lo ignora, la tierra está desierta y eso tampoco lo sabe, aquellas pieles que alguna vez me hicieron acomodadas caricias hoy dejan desparramadas las cicatrices impiadosas de la ignorancia. No lo juzgo, lo comprendo están todos allá en el Circo, festejando ¡el día del amigo! El día donde el teatro de la farsa ha llenado sus palcos y plateas; dejadme amigos al menos por una vez piadosa que sea yo quien decida cuando dejar la escena.
Estoy cansada, muy cansada de tanta hipocresía, estoy cansada muy cansada, basta de bochinche de embarulladas palabras, déjenme dormir al menos eso.
Fanny G Jaretón