El auge de los registros en dominios .ai impulsado por el interés en la inteligencia artificial

El auge de los registros en dominios .ai impulsado por el interés en la inteligencia artificial

La inteligencia artificial (IA) ha llegado para quedarse, y su influencia se refleja en los lugares más inesperados.

Economía | 04 de septiembre de 2023
Pere Borràs

Anguila, una diminuta isla británica en el Caribe, se ha convertido en un auténtico tesoro digital gracias a su dominio ".ai". En un mundo obsesionado con la IA, este pequeño país podría generar hasta $30 millones en ingresos este año, según Bloomberg.

El interés en la inteligencia artificial ha explotado en el último año, lo que ha hecho que el dominio de nivel superior ".ai" de Anguila sea especialmente atractivo para las empresas tecnológicas. Este fenómeno está teniendo un impacto significativo en la economía de Anguila, que depende en gran medida del turismo y se ha visto afectada por la pandemia.

Puede que $30 millones en ingresos por dominios no parezcan mucho en comparación con las enormes inversiones que se realizan en IA, pero para Anguila, con una superficie total de 35 millas cuadradas y una población de 15,753 habitantes, esto es una bendición. Las empresas registradoras, como GoDaddy, deben pagar a Anguila un precio fijo de $140 por un registro de dos años, y estos precios están aumentando debido a la creciente demanda.

Según Bloomberg, en 2021, Anguila apenas obtuvo $7.4 millones por registros de dominios .ai. Sin embargo, todo cambió con el lanzamiento de ChatGPT de OpenAI el año pasado. Su lanzamiento desató una enorme ola de entusiasmo, temor e inversión en IA. Vince Cate, quien ha gestionado el dominio ".ai" para Anguila durante décadas, afirmó que los registros de .ai prácticamente se duplicaron en el último año. "Desde el 30 de noviembre, las cosas son muy diferentes aquí", declaró.

Anguila ha estado a cargo de asignar direcciones web con el dominio ".ai" desde 1995. Los países recibieron por primera vez sus propios nombres de dominio de nivel superior (ccTLD, o códigos de país de nivel superior) en 1985, incluyendo dominios como .us (Estados Unidos), .uk (Reino Unido) y .de (Alemania). Estos ccTLD tenían la intención original de dar a las naciones una presencia distintiva en Internet y se utilizaban principalmente para sitios web que se centraban en esos países o sus residentes.

Con el tiempo, algunos ccTLD, como .tv para Tuvalu, han adquirido significados adicionales y usos más amplios, especialmente cuando sus abreviaturas coinciden por casualidad con otras palabras, como AI para "inteligencia artificial" en este caso. Como resultado, startups de IA de alto perfil, como Stability.ai y Character.ai, han optado por direcciones web que terminan en ".ai", contribuyendo significativamente al inesperado flujo de ingresos de la isla.

Aunque algunos expertos prevén una disminución en la "fiebre del oro de la IA" que podría enfriar eventualmente el mercado de los dominios ".ai", el impacto en la economía de Anguila ya es significativo. Con los ingresos de los registros de dominios ".ai" estimados como un porcentaje notable del producto interno bruto del territorio ($300 millones en 2021), Anguila es un estudio de caso de cómo incluso una pequeña isla caribeña puede beneficiarse de un auge tecnológico global.

El dominio ".ai" se ha convertido en el portal digital hacia el mundo de la inteligencia artificial, y Anguila ha sabido capitalizar esta oportunidad de manera brillante. A medida que la IA continúa transformando la forma en que vivimos y trabajamos, es probable que la demanda de dominios ".ai" siga creciendo. Si eres parte de la revolución tecnológica, mantener un ojo en este dominio podría ser una inversión inteligente.

En el mundo digital, incluso los lugares más pequeños pueden cosechar grandes recompensas. La IA ha convertido su dominio ".ai" en un activo valioso, y su éxito es un recordatorio de que en el mundo conectado de hoy, las oportunidades pueden surgir en los lugares más inesperados.

La fiebre de la inteligencia artificial está lejos de terminar, y el dominio ".ai" de Anguila es solo una muestra de lo que el futuro podría deparar en este emocionante campo tecnológico.

 


 


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